Irradiar amor es manifestación de mi presencia.
Sostened la Iglesia de Dios.
Abrid vuestro espíritu, que deseo infundir mis dones en vuestro ser.
Yo soy la esencia del amor de Dios.
Santificad vuestras almas.
Yo descenderé a la faz de la tierra.
Posaré en las almas áridas y las transformaré en amor.
Yo soy comunión del Padre y del Hijo.
Cantad a Mí, Espíritu de Dios.
Luchad con mi fuerza.
Revivid vuestra fe.
Calmad el deseo de amor de Dios.
Conceded el perdón a vuestros enemigos.
Vivid deseosos de Mí.
Escuchad al Dios santificador.
Yo os encenderé con fuego divino.
Vivid en docilidad a mi deseo.
Cantad con alegría al Dios amoroso, jubiloso, generoso, vivo fuego.
Cantad al Dios mansedumbre infinita, al Dios artista sublime, al Dios consolador.
Mi fuego de amor cae como lluvia sobre vosotros.
Necesito soledad para que el hombre me escuche.
Soy camino del hombre.
Soy guía al supremo Hacedor.
Yo aposento en vuestras almas para la comunión sublime del Dios hecho amor.
Amor os doy: regocijaos como el ave que salta de gozo.
Sonreídme como fuentes saltarinas.
Brillad como astros bellísimos.
Cantadme como el arrullo del mar.
Abríos a Mí, que soy inmenso océano de amor.
Vivid dándome loor.
Sonreíd al Dios amor.
No viváis siendo muertos en vida.
Vivid cantando al amor.
Orad con gozo perenne al fuego inmenso de Dios.
Vivid como hermanos.
Lucid como ángeles ante el Dios, llama ardiente de amor.
Abrid vuestros labios y orad al eterno aposentador.
Gozaos, hermanos del Hijo de Dios.
Que cese ya el odio en la tierra.
Vivid deseando la paz.
El Dios, suprema belleza, sus dones os quiere dejar.
Yo soy la fuerza del hombre.
Cantad con cánticos nuevos la gloria del Dios hecho amor.
Yo vivo pendiente del hombre, buscando dónde poder reposar.
Soy viento que sopla en la tierra.
Soy luz que da vida y calor.
Soy la belleza del hombre.
Gozad en el Espíritu de Dios.
Que, llenos de amor, vibren gozosos los hombres y gocen del celo de Dios.
Que sellen sus almas de amor para Mí.
Sólo a Mí daréis vuestro amor, Yo, vuestro eterno hacedor.
Yo vivo contento del hombre, si el hombre me da todo su amor.
Que todos unidos los hombres se den pronto al verdadero Amor.
Que vivan amando y cantando las glorias del eterno Señor.
Decid con anhelos de santos: ‘cantamos gozosos al Dios hecho fuego; que venga a nosotros y encienda las almas de amor.’
Que luchen los hombres con gozo y proclamen las glorias de Dios, que Yo, belleza de Dios increada, sostendré vuestro ardor.
Vivir sólo anhelo en vosotros; permaneced en mi amor.
Cantemos unidos al Dios llama ardiente.
Vivid en amor y loor, dando gozo al Dios viento y fuego, que el Cielo está lleno de amor.
Y que el hombre vuelva su corazón al hermoso Dios.
Hermanos, voltead hacia el cielo, que a vosotros descienden los dones del Dios hecho amor.
Que, envueltos en amor, volváis vuestras almas al único y verdadero Amor.
Que el ruido del hombre no inquiete el espíritu del alma que amante suspira y se inquieta del celo de Dios.
Que las maravillas de esta tierra alaben gozosas las obras del Dios sempiterno.
Los ángeles cantan gozosos al Dios que es deidad y hermosura.
Los santos se gozan del Dios fuego ardiente; y, llenos de gloria, alaben gozosos al Dios alegría.
Venid presurosos; calmad al Dios fuego con vuestro deseo de amor.
Que bendigan la faz de la tierra, para que el Dios, viento y fuego, descienda a vosotros en llamas de amor.
Reparto mis dones al hombre, buscando mi alojo en el ser del hombre.
El Espíritu de Dios os saluda con amor suplicante.
Vivid en unión, encendidos de amor.
Buscad el consuelo perenne del Dios hecho fuego que goza al veros encendidos de amor.
Amad y bendecid al Dios alegría, al Dios alabanza, al Dios fuego ardiente, al Dios que os ama.
Que unidos viváis en Mí, que Yo os libertaré de vicios que al hombre destruyen y mandan al fuego ardiente, donde habitan las almas que ofendieron al Dios fuego eterno.
Que ardientes viváis en la tierra.
Que unidos en manos amantes proclaméis al mundo que un Dios, hecho fuego, se vino a posar en la tierra, deseoso de ser admitido muy dentro, muy entro del hombre; y no halló ni amor ni consuelo y vive repartiendo amor.
Yo soy la ventura del hombre.
Dadme vosotros alegría, que soy el Dios hecho fuego por dar calor en la tierra.
Celosos del Reino de Dios, venid presurosos y amadme, y dadme consuelo y loor.
Amigos de Alianza del Cielo, mirad al Dios fuego, que viene a vosotros dándoos consuelo.
Amadme.
Venid a mi amor.
Que Yo soy el Dios anhelante del sí del hombre en amor.
Que todos unido en fuego, cantéis la alabanza al Señor.
Que reine la paz en el hombre.
Que en Mí busque consuelo y perdón.
Yo vine a traer a la tierra mi fuego de amor celestial.
Que canten gozosos los hombres al Dios que busca consuelo y amor.
Sacerdotes que estáis sin mi fuego: buscad mi consuelo.
Venid a Mí fuego, que busco de vosotros el celo de darme vuestra entrega y amor.
¿Sentís mi consuelo?
Aquí estoy hecho fuego, dándoos todo mi amor.
Abrid vuestras almas al Fuego que da vida y gozo al infiel pecador.
Yo soy como el mar torrentoso que vivo cerquita del hombre, deseando que me dé amor y consuelo.
Yo soy la vida en el hombre.
Soy agua que sacia su sed.
Soy fuente de gozo y contento.
Por eso, vosotros los hombres, abrid vuestras almas a Dios.
Que todos mis dones son vuestros; por eso venid a mi amor.
Que Yo, revestido de fuego, rescato al hombre hacia el cielo y lo llevo a la Trinidad de Dios.
Yo soy belleza florida, que engendro amor en el hombre.
Buscadme con gozo y anhelo, que aquí está su Dios hecho fuego deseoso de darse de todo al hombre con gozo encendido de amor.
Que canten mis almas al Fuego que es gozo y verdad.
Que viene a vosotros el cielo del Dios viento y fuego que amándoos está.
Que mis dones a vos repartidos sean gozo perenne en vosotros.
Que trasluzca en vosotros mi celo de amor grande y consuelo.
Yo soy vuestro Cielo, venid a Mí todos con gozo y amor.
Yo soy gozo en las almas y fuego.
Que cese la guerra y dolor.
Que vengan a Mí todos, todos.
Que Yo soy la paz de la tierra, que vengo a daros consuelo, ternura y amor.
Yo vengo a vosotros con celo de profundo amor.
Que sea de vosotros mi anhelo.
Buscad la justicia del cielo.
Venid a Mí con gozo que viene a vosotros el fuego, torrente de amor celestial.
Que todos, cantando a Mí, fuego, cambiéis vuestras vidas con fuego de amor persistente y veraz.
Que suene por toda la tierra que habita en vosotros el fuego, que vino a traer el consuelo al hombre deseoso de amar.
Que griten por toda la tierra el canto al Dios celestial, que vino convertido en fuego, deseoso de darse en verdad.
Que destilen los hombres mi fuego y habrá siempre sosiego en la tierra, y habrá también paz.
Que Yo soy la vida del cielo, unión del Padre y del Hijo, amor del Rey celestial.
Que vivan gozosos los hombres pendientes de mi verdad.
Que cambien de tono sus vidas que Yo pronto me les quiero dar.
Que vivan unidos en celo de este mi fuego que les encenderá.
Yo soy la fragancia del cielo que busco tener el consuelo del hombre que me ama a la par.
Que me amen en toda la tierra.
Que vivan las almas con fuego al amor de Dios hecho fuego y que envuelto en viento viene a soplar.
Yo soy agua que baja del cielo.
Venid todos y tomad que Yo seré alivio y consuelo.
Que cese en vosotros la sed en amar.
Que el hombre no halla consuelo cuando fuera vive del amor del Rey celestial.
Vivid cantando al cielo, envueltos en fe y caridad, pidiendo al Dios hecho fuego el aumento de vuestra esperanza.
Yo soy el cielo, premio de amor del Rey celestial.
Yo soy remanso del hombre, Soy Dios, belleza sin igual, hermosura fragante del cielo que doy todo mi consuelo al hombre que anhela la paz.
-Yo soy el Poeta infinito.
Yo soy música que embelesa al hombre con suave fragancia, con dulce esperanza, con gozo en el ser de Dios.
Que canten mis almas las glorias excelsas del divino Amor.
Mis cuerdas de canto son finas y arrullan al alma, y tocan con tino las fibras sensibles del corazón del hombre.
Cambiando sus vicios por dones divinos, cantándole al hombre que soy su Dios, fuego divino.
Portento de gozo que suplica al hombre que ame y se entregue en locura santa al Dios esperanza que amándole está.
Que canten los hombres, con gozo sin fin, al Fuego que al Hijo os vine a traer.
Que en un alma Virgen encendí el amor, portento y misterio de amor celestial.
Que el Fuego consuma las almas de amor y vivan cantando a la Llama de amor.
HIMNO AL ESPÍRITU SANTO
1. Os amo a vosotros,
mis hijos queridos,
pues sois esperanza
del Fuego de amor.
2. Vivid con constancia,
amigos queridos,
que soy el consuelo
que alienta la fe.
3. La fe que sostiene
la Iglesia del Hijo,
torrente de fuego,
de amor y verdad.
4. Unámonos todos,
alzando las manos,
señal de esperanza
al Fuego de amor.
5. Buscando al hermano
con fe y esperanza
y dándole alivio
en todo dolor.
6. Que el mundo sostenga
mi fuego amoroso,
viviendo en constante
alabanza de Dios.
7. Que todo mi fuego
se extienda en la tierra,
pues soy el consuelo,
el Dios hecho amor.
8. Que todos unidos,
en fe y esperanza,
proclamen con tono
el canto de Alianza
al Dios hecho fuego,
Amor de los Dos.
-Yo soy el Espíritu de Dios que aletea con fuego encendido de amor.
9. Iglesia viva
que habitas la tierra.
Alzad vuestro gozo
al Dios embeleso,
fuente de amor.
10. Que este himno se escuche
en toda la tierra,
pues vino del cielo
para que vosotros
cantéis con amor.
Cantadle con gozo
Al Fuego de Dios.
ESTRUCTURADO PARA EL CANTO.
1. Os amo a vosotros,
mis hijos queridos,
pues sois esperanza
del Fuego de amor.
2. Vivid con constancia,
amigos queridos,
que soy el consuelo
que alienta la fe.
3. La fe que sostiene
la Iglesia del Hijo,
torrente de fuego,
de amor y verdad.
4. Que todos unidos,
en fe y esperanza,
proclamen con tono
el canto de Alianza
al Dios hecho fuego,
Amor de los Dos.
5. Unámonos todos,
alzando las manos,
señal de esperanza
al Fuego de amor.
6. Buscando al hermano
con fe y esperanza
y dándole alivio
en todo dolor.
7. Que este himno se escuche
en toda la tierra,
pues vino del cielo
para que vosotros
cantéis con amor.
Cantadle con gozo
Al Fuego de Dios.
8. Que el mundo sostenga
mi fuego amoroso,
viviendo en constante
alabanza de Dios.
9. Que todo mi fuego
se extienda en la tierra,
pues soy el consuelo,
el Dios hecho amor.
10. Que todos unidos en fe y esperanza
proclamen con tono
el canto de Alianza
al Dios hecho fuego,
amor de los Dos.
No temas.
Soy Dios, belleza increada y amabilísima, maná de consuelo para el hombre, perenne dulzura, embeleso del Padre, sostén del amor del Hijo y porvenir del hombre.
Yo soy carisma de amor.
Soy un Dios sempiterno, glorioso embeleso, arrullo del alma, torrente de amor, portento de luz celestial.
Yo soy fuego y remanso del alma deseosa del Rey de la gloria.
Yo avivo con fuerza el amor del hombre para que goce del amor de Dios.
Yo soy viva fuerza que destruye el mal.
Yo soy tierno fuego que abrasa las almas en celo de Dios.
Reparto mis dones doquier en la tierra.
Doy luz en la oscuridad.
Vivo sonriendo al hombre.
Que cante con gozo el hombre a su Dios, que soy su consuelo, su amor y su paz.
Que brille en el cielo mi luz celestial.
Que el hombre busque la paz en la tierra y dé amor a su hermano, don celestial.
30 de mayo de 1982.
Noche-Vigilia de Pentecostés de 12 a 4:30 a.m.
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