El Dios Fuego

Yo soy el Dios fuego de santidad. 
Soy el Dios de infinita omnipotencia que vengo al alma como mensajero del amor del Padre y del Hijo. 
Soy fuego inextinguible de amor sobrenatural. 
Soy el Dios que atrae al alma a la virtud y que la lleno del néctar del amor divino. 
Soy irreversiblemente santo. Lleno de bondad al alma y la habito para poseerla en plenitud. Mi amor abarca todo el ser de aquel que se abre al Amor y que con amor busca la perfección. 
 
Soy fuego iluminativo, fuego que irradia santidad. 
Soy luz de vida celestial. 
Soy el Dios que enriquece el ser del hombre con mis dones sobrenaturales. 
 
Soy el voluntario enamorado del alma. 
Soy el huésped secreto que estoy dentro de tu ser. 
Soy silencio de vida, pues en el silencio ahuyento del hombre el deseo de pecado. 
Soy un Dios que, como un torbellino inquebrantable, traspasa toda barrera que aparte al hombre de la verdad. 
 
Soy un Dios misterioso e irresistible que con amor cautivo al alma y la embeleso ante el Dios amor. 
Soy el Dios que sin limitaciones de amor me unifico con la palabra divina, para dar al alma el conocimiento de Dios, y para que sea aceptado y amado. 
Soy el Dios que con luz de vida hace dichoso al que posee, e ilustro al entendimiento humano. 
Soy fuego de amor y bienestar para toda alma. 
Soy el Espíritu del Padre que con el Hijo purifico al alma. 
Soy un Dios encantador que le canta con amor al ser que se enamora del Dios amor. 
 
Soy unión relacional de amor con el Padre y el Hijo, para dar al alma el deseo de vivir en gracia y santidad a los ojos del Dios amor y verdad. 
 
 
Guadalajara, Jal. 16 de Mayo, de 1983.

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